viernes, 18 de febrero de 2011

Lo nuestro duró ,lo que duran dos peces de hielo
en un güisqui on the rocks, en vez de fingir, o, estrellarme una copa de celos,
le dio por reír.
De pronto me vi, como un perro de nadie . Ladrando, a las puertas del cielo.
Me dejó un neceser con agravios, la miel en los labios y escarcha en el pelo.
Tenían razón mis amantes en eso de que, antes,
  la mala era yo, con una excepción: esta vez, 
yo quería quererlo querer
y el no.
Así que se fue, me dejó el corazón en los huesos y yo de rodillas.
Desde el taxi, y haciendo un exceso, me tiró dos besos… uno por mejilla.
Y regresé a la maldición del cajón sin su ropa,
a la perdición de los bares de copas,
a las cenicientas de saldo y esquina .
(...)
Tanto lo quería, que, tardé, en aprender
a olvidarlo, diecinueve días y quinientas noches.
Dijo hola y adiós, y, el portazo, sonó como un signo de interrogación,
sospecho que así se vengaba, a través del olvido,
Cupido de mi.
No pido perdón, ¿para qué? si me va a perdonar
porque ya no le importa…

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Gracias !

El amor es irracional.Cuanto mas quieres a alguien, menos logica tiene todo